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El Fondo de Justicia Social de Tzedek (Tzedek) ha estado apoyando el trabajo de justicia social de organizaciones de base, colectivos y cooperativas, organizaciones sin fines de lucro y líderes locales desde finales de los años 80. Financiamos trabajos centrados en Justicia LGBTQ, Justicia Racial, y la Desmantelamiento del Antisemitismo y que estén alineados con nuestra misión.
Nuestra Misión
El fondo de Justicia Social Tzedek distribuye dinero, recursos y poder para apoyar el cambio de sistemas y la sanación comunitaria en Asheville, Carolina del Norte. Por medio de la filantropía adaptativa y basada en la confianza, resistimos los sistemas opresivos y trabajamos para transformar nuestro hogar colectivo en un lugar donde todes florezcan.
Nuestra Visión
Soñamos con un Asheville próspero, donde las necesidades de todes se satisfagan abundantemente y donde todes estén segures, sean respetades y celebrades. Creemos que una comunidad arraigada en la alegría y el amor es posible.
Nuestros valores organizacionales y prácticas
Lo que hacemos importa, pero la manera cómo lo hacemos es igual de importante. Los siguientes valores y prácticas organizacionales describen formas de ser y mostrarse que nos alinean con la visión fundacional de Amy Mandel. Desde esta posición no solo podemos cambiar patrones tóxicos de la filantropía pero también vivimos en el mundo con el que soñamos.
Como organización nos esforzamos por incorporar los siguientes valores y prácticas en nuestro trabajo diario:
PATICIPACIÓN COMUNITARIA DE GRAN ALCANCE
Estar arraigade en la comunidad requiere una participación profunda con nuestres socies comunitaries. Para hacer nuestro trabajo, necesitamos tener un indicador del pulso de lo que está sucediendo en nuestra área política, económica, cultural e históricamente. Entendemos que todes, desde les miembros más vulnerables de nuestra comunidad hasta aquelles con poder institucional, tienen información importante para nosotres. En nuestro trabajo, nos esforzamos por actuar siendo conscientes que no hay solo una comunidad, ni solo una Asheville, por lo que buscamos activamente la sabiduría de comunidades de gran alcance, y practicamos mostrarnos y estar en conversación sobre prácticas organizativas esenciales y valiosas.
APRENDIZAJE CONTINUO
Como organización de aprendizaje, permitimos explícitamente que nuestro análisis evolucione con el tiempo en respuesta a lo que sucede en nuestro mundo. Seguimos buscando el aprendizaje y nos sentamos con lo que aprendemos para sintetizar e integrar la sabiduría. En nuestro trabajo, practicamos el aprendizaje continuo observando activamente lo que sucede en el mundo que nos rodea, en los movimientos sociales y la filantropía. Utilizamos todas nuestras inteligencias: sabiduría intelectual, emocional, espiritual y encarnada para guiar nuestro trabajo. Nuestra estrategia organizacional, prácticas de otorgamiento de becas y las ofertas de programas cambian en respuesta a nuestro aprendizaje.
HUMILDAD
La humildad es una práctica que contrarresta la superioridad interiorizada. Requiere una receptividad profunda a las experiencias y perspectivas de los demás. Pero actuar con humildad no es actuar con culpa. Podemos sostener humildemente que hay tantas cosas que no sabemos Y que sabemos algunas cosas esenciales. En nuestro trabajo, practicamos la humildad reconocemos nuestros propios errores, admitimos cuando estamos equivocades, admitimos con valentía lo que no sabemos y nuestros limites, damos crédito a les demás por sus contribuciones y nos dejamos guiar por experiencias que no son nuestras.
CONSTRUCCION DE PUENTES
La construcción de puentes es el trabajo de buscar continuamente puntos de conexión y colaboración. Entendemos que nuestra supervivencia y prosperidad dependen de nuestra independencia. Nos resistimos a la cultura de quejas -avergonzar y culpar a les demás. Practicamos la construcción de puentes invitando a personas a la mesa, incluyendo colaboradores improbables. Buscamos posibles sinergias y creemos en los conflictos y las fallas como oportunidades para mejorar y profundizar nuestra conexión.
CULTIVANDO RELACIONES
Las personas son tan importantes como los resultados de nuestro trabajo o el logro de los objetivos del proyecto. El cultivo de relaciones requiere que nos presentemos como seres completos. Entendemos que la información invaluable proviene de las organizaciones y líderes cuyo trabajo apoyamos. En nuestro trabajo, cultivamos relaciones tomando tiempo con las personas y sumergiéndonos en una conversación intencional. Resistimos nuestra tendencia culturalmente condicionada hacia la polarización y practicamos la cultivación de relaciones adoptando una perspectiva matizada. Entendemos que el mundo es complicado y desordenado. Las personas, nosotres incluides, no somos ni buenes ni males.
SISTEMAS DE PENSAMIENTO Y ESTRATEGIA FUERA DE LO NORMAL
Buscamos comprender las causas profundas de los problemas que enfrentamos. En nuestro trabajo, practicamos el pensamiento sistémico rechazando el status quo para entender el mundo. Continuamente preguntamos qué es posible y dónde hay oportunidades para el cambio social. Asumimos riesgos y buscamos estrategias listas para usar. Sabemos que este momento requiere más que las mismas soluciones antiguas porque esas soluciones a menudo conducen a los mismos resultados antiguos.
PRIORIZAR LAS ORGANIZACIONES DE LIDERAZGO IMPACTADO Y DE BASE
Las personas más directamente afectadas por los sistemas de injusticia están mejor situadas para liderar el trabajo de cambio. Priorizamos el liderazgo afectado y las organizaciones de base confiando en que las personas saben lo que necesitan. Creemos que las organizaciones centradas en la activación de comunidades y la creación de poder conducirán al cambio social profundo que necesitamos.
A lo largo de 2019, Tzedek recolectó la sabiduría de 29 líderes sin fines de lucro y de movimiento de Asheville, socies comunitaries y líderes en el campo de la filantropía de justicia social a través de un proceso de investigación basada en la comunidad. Once personas de Asheville también sirvieron como asesores de confianza para guiar el proceso y analizar los datos. Para crear nuestra nueva misión, visión y valores, comenzamos con las palabras e historias compartidas con nosotres a lo largo de ese proceso.